El Elche CF ha regresado este jueves por la mañana a los entrenamientos con el punto de mira puesto en el último partido del 2025. En la sesión sobre el césped del Martínez Valero no han estado presentes Marc Aguado y André Da Silva, ambos se han quedado en el gimnasio. El centrocampista maño por precaución, por lo que no debería tener problemas para llegar al partido del fin de semana. Más complicado lo tiene el delantero portugués, que no acaba de recuperarse de unas molestias que le están impidiendo participar. Además, Grady Diang se ha ejercitado aparte con el readaptador. 

El equipo de Eder Sarabia recibe el domingo a las 18:30 horas al Rayo Vallecano, un rival que esta noche disputa la Conference League y que en Liga tiene un punto menos. Los ilicitanos despedirán el año en su feudo, donde a lo largo de todo el 2025 ha cosechado 12 victorias, cinco empates y tan solo dos derrotas, ambas la campaña pasada, ante el Levante y el Atlético de Madrid.

El técnico Eder Sarabia es consciente de la importancia del partido del domingo. Además, supone la despedida a un 2025 que ha sido histórico en clave franjiverde, coronado con el ascenso a Primera en Riazor el 1 de junio. El bilbaíno publicaba hace unos días este mensaje a través de sus redes sociales: “El domingo, contra el Rayo, tiene que ser un partido inolvidable en el Martínez Valero para ponerle la guinda y celebrar juntos este histórico 2025. ¡Mucho Elche!”.

El Elche está invicto en su estadio y es undécimo con 19 puntos, mientras que el Rayo está por debajo y tan solo tiene un punto menos. El equipo de Íñigo Pérez visitará el Martínez Valero con dos bajas importantes: la de Jorge de Frutos, lesionado en el último duelo ante el Betis, y la de Ratiu, lateral diestro que vio la quinta amarilla. Además, tampoco estarán disponibles Pathé Ciss y Randy Nteka, que se han marchado a la Copa África.

La estadística está a favor de los franjiverdes, que en Primera siempre han ganado al Martínez Valero al equipo franjirrojo. En cinco partidos, el Elche se ha impuesto en todos con un balance de 13 goles a favor y sólo uno en contra.

El Elche CF se ha clasificado este martes por la tarde-noche para los octavos de final de la Copa del Rey. El equipo franjiverde se ha impuesto por la mínima a la SD Eibar (0-1) en Ipurua gracias a un gol en el minuto 28 de Adam Boayar, que ha aprovechado un error del portero local en la salida de balón para desequilibrar la balanza. No sin sufrir porque en la segunda mitad el equipo armero gozó de hasta dos ocasiones muy claras para forzar la prórroga. En ambas la intervención de Matías fue providencial para salvar a los suyos. En la primera detuvo un remate al palo corto de Adu Ares y en el minuto 70 se estiró para evitar el tanto de penalti de José Corpas.

Apostó Sarabia por un once plagado de los futbolistas menos habituales en Liga. Dituro volvió a ser el guardameta de la Copa, en defensa participaron John, Bambo Diaby, Petrot y Pedrosa, el centro del campo lo formaron Redondo, Rodri Mendoza y Ali Houary; y arriba Josan y Adam Boayar acompañaron a Álvaro Rodríguez.

El Elche entró bien al partido, con Adrià Pedrosa probando suerte hasta en dos ocasiones. Sin embargo, el Eibar le perdió el respeto inicial a los franjiverdes y fue de menos a más. Hasta el punto de tener acercamientos muy claros para poner las tablas. Si bien es cierto que Dituro no tuvo que intervenir en la primera mitad, sí que los locales lo intentaron con muy buenas aproximaciones.

La balanza se desequilibró justo antes de llegar a la primera media hora de juego. Si el sábado el que protagonizó el error garrafal de la derrota en Mallorca fue Iñaki Peña, esta vez le tocó al portero del Eibar, Luis López, quien intentando jugar desde su propia área envió un pase defectuoso e impreciso a uno de sus centrales. Ese error lo aprovechó Adam Boayar para marcar y adelantar al Elche. Por cierto, su segundo tanto esta temporada en la Copa.

A partir de ahí, el equipo de Sarabia gozó de oportunidades para ampliar la ventaja pero por cuestión de centímetros el 0-2 nunca llegó. Tras el paso por los vestuarios, el Eibar le metió una marcha más al partido y hasta la salida de Héctor Fort el Elche no pareció reaccionar. La energía del lateral cedido por el Barcelona dotó de una mayor presencia ofensiva a los franjiverdes.

Adu Ares, muy activo en la banda izquierda hasta que fue sustituido, probó a Dituro con un disparo ajustado al palo corto. Fue el primer aviso. El segundo, y el más claro, llegó en el minuto 70. El colegiado andaluz Alejandro Quintero pitó penalti de Pedrosa sobre Corpas, el especialista del Eibar encargado de ejecutar la pena máxima. Una acción que detuvo estirándose Matías Dituro. Otra vez providencial. Ahí se desvanecieron las esperanzas armeras de al menos forzar la prórroga.

Al final, misión cumplida y el Elche disputará los octavos de final del torneo del KO.

El Elche cuajó el peor partido del curso en Mallorca. Tras la derrota, Sarabia habló sin pelos en la lengua y con la claridad que se caracteriza tanto en las victorias como en las derrotas: “El empate habría sido un milagro porque el resultado ya al descanso era injusto, hemos hecho un muy mal partido. Hemos sido un equipo blandísimo y ese segundo gol ha condicionado, es responsabilidad mía porque es lo que pedimos”.

También lamentó lo que supone la derrota: “Estoy triste porque otra vez después de un gran partido en casa hacemos una gran cagada. En la jornada 16 hay cosas que tenemos que hacer mejor. En la segunda parte nos ha faltado valentía, no hemos sido nosotros”.

Sarabia no responsabilizó a sus futbolistas la falta de actitud: “Si al equipo le faltase actitud el máximo responsable seria yo y me tendría que ir. No va por ahí, igual el jugador no entiende algunas cosas, que son importantes para competir fuera de casa. El Mallorca nos ha superado, recuerdo cuatro entradas buenas, el resto hemos llegado tarde, blandos y por ahí hemos empezado a perder el partido”.

Pese a ello, el bilbaíno resumió la situación actual del Elche: “Somos un recién ascendido y estamos en mitad de tabla. En el computo general la nota es buena, pero para que sea excelente tenemos que entender cosas fuera de casa”.

“No he hablado con él, en el descanso le he dicho que las situaciones estaban por dentro, aunque en la jugada del gol no. No hemos estado finos en la presión del Mallorca. Es parte del proceso y seguir trabajando lo que somos. Responsabilidad absoluta mía”, comentó cuando se le preguntó por el estado de ánimo de Iñaki Peña.

También mandó a callar a un futbolista suyo durante el encuentro: “A veces nos falta humildad y si un compañero te dice algo hay que asumirlo”. También fue claro con respecto a la afición: “Primero jugamos por nosotros, pero nos da pena por ellos, seguiremos currando”.