Elche y Alicante continúan trabajando conjuntamente para llevar a cabo proyectos que beneficien a ambas poblaciones en materia de infraestructuras, transporte, acción social, cultura, turismo o deportes.

En este sentido, hoy ha tenido lugar un nuevo encuentro entre los responsables de Movilidad de ambos ayuntamientos, Claudio Guilabert por parte de Elche y Carlos de Juan por Alicante. Una reunión cuyo principal objetivo ha sido continuar avanzando en diferentes estrategias de conexión futura entre ambos municipios.

Ambos ediles han abordado la necesidad de crear una tarjeta de transporte única para que ilicitanos y alicantinos puedan desplazarse en el transporte público de ambas ciudades. Se trata de un nuevo bono compartido con el que se pretende mejorar la conectividad entre Elche y Alicante, así como las frecuencias de todos los transportes públicos.

Por otra parte, en la reunión se ha trabajado en un nuevo proyecto con el que ambos municipios pretenden realizar una vía ciclo-peatonal que una Urbanova con Arenales del Sol. Se trata de una prolongación del sendero ya existente entre Alicante y Urbanova y que ambos consistorios han acordado que en los próximos años llegue hasta la pedanía ilicitana.

Ambas administraciones se han emplazado a futuras reuniones para continuar trabajando y avanzando en estas y muchas más cuestiones en materia de movilidad.

La calle Josefina Manresa, en la zona Kelme de Altabix nuevo, pasará de tener dos carriles viales a tener uno. A cambio, se crearán 125 plazas de aparcamiento en toda la vía. Según el alcalde, los propios vecinos han pedido reducir la velocidad de esta vía y con esta modificación podrán aumentar la seguridad vial y las plazas de aparcamiento. Además, las máquinas trabajan ahora en asfaltar toda la calle. El importe de esta actuación es de 100.000 euros, según ha informado el alcalde, Pablo Ruz. Además, se plantará nuevo arbolado en la calle para crear refugios climáticos. Se repondrán 14 tijuanas en Josefina Manresa y se añadirán posteriormente plátanos de sombra en las inmediaciones de Plaza Castilla. 

El Ayuntamiento va a dar al barrio de Carrús una nueva zona verde. Se ha sacado a licitación las obras para crear un parque público en el entorno de la ermita de San Crispín, junto al polígono industrial de Carrús, una zona desaprovechada a pesar de su enclave y de ser muy visitada durante las fiestas del patrón de lo zapateros.

El concejal de Servicios Públicos, Claudio Guilabert, se ha desplazado  a la zona de la ermita de San Crispín para anunciar que van a crear en este lugar un parque público para el barrio de Carrús. Las obras están en licitación y el presupuesto que se ha destinado es de 173.000 euros. Esperan obtener la subvención que desde el IVACE destinan a la modernización de las zonas industriales. Más de 1.200 metros cuadrados se convertirán en una nueva zona verde con esta actuación integral donde se colocará alumbrado público y se respetarán todas las calles y accesos.