El Consejo de Administración de Pimesa ha dado luz verde a una nueva forma de gestión en la estación de servicio que hay  junto a la estación de autobuses. Tras la finalización del contrato con Cepsa, se optará por una marca propia, denominada ‘L’Estació, una nueva imagen corporativa y una tienda Discost. Además, los precios serán más competitivos.

Pimesa también ha aprobado la prórroga de cinco meses solicitada por la empresa encargada de la construcción de uno de los edificios del Campus Tecnológico en el Parque Empresarial debido al retraso en el suministro de materiales por la pandemia y las lluvias torrenciales. Está previsto que las obras terminen en julio. Mientras que las del segundo edificio finalizará en el mes de mayo.

Respecto al tercer edificio del barrio de San Antón, las obras está previsto que acaben a finales de marzo. En las próximas semanas se aprobarán los pliegos para que los vecinos puedan empezar a solicitar la compra de las viviendas. 

El equipo de gobierno buscará una alternativa para desbloquear el desarrollo urbanístico del sector E-16, situado en la Finca el Arsenal, junto al Huerto de la Virgen. La edil de Urbanismo, Ana Arabid ha explicado que se encargará a los técnicos municipales la redacción de una modificación del proyecto que buscará reducir las alturas. La edil ha asegurado que con esta alternativa se quiere por el bien del municipio desarrollar este sector, proteger el Palmeral histórico y amparar los intereses legítimos de los propietarios del suelo. 

El Plan general del 98 calificó como suelo urbanizable el sector E-16 en el que incluyó tres huertos de Palmeras. La declaración del Palmeral vino después para dejar esta zona en el área de influencia de la protección del Palmeral histórico. Es por ello que en 2002 se paralizó la actuación de construir de casi un millar de viviendas en este sector. En 2011 se aprobó el Plan parcial y en 2013 se modificó permitiendo más alturas, hasta 8. En diciembre la Conselleria de Cultura rechazó definitivamente el proyecto por su impacto paisajístico sobre el Palmeral, al igual que el Ministerio que instaron al ayuntamiento a no permitir una actuación incompatible con la declaración del Palmeral como Patrimonio de la Humanidad.

El pasado 31 de enero finalizó la consulta previa a la revisión del Plan General. El Margalló ha sido uno de los colectivos que ha presentado varias propuestas para que se tengan en cuenta a la hora de redactar el nuevo planeamiento urbanístico del municipio. En primer lugar, aseguran que echan en falta estudios previos para cuantificar el potencial de viviendas y población en el suelo disponible así como la cartografía territorial que ha realizado la Generalitat de los suelos permeables de nuestra zona.

El colectivo propone que se incorporen medidas concretas contra el cambio climático y se abandone la recalificación de suelo no urbanizable en las pedanías y se desclasifique el que  no se ha desarrollado, especialmente, en el litoral. Apuestan por diseñar una red de vías para peatones y ciclistas y corredores ecológicos.

También, proponen el plan de gestión de residuos municipal, que no se ha realizado en la nueva contrata de limpiezas. Además, están en contra de permitir el desarrollo de nuevas grandes superficies comerciales y piden una revisión profunda del catálogo de bienes patrimoniales.